Noche de verano
Un Cierto aire marginal, las botas de los pantalones raídas y las medias rotas en el talón, bajo los zapatos. Una chica espera espectralmente frente a la puerta del cine y mi cuerpo se desmadeja tratando de tocarla. La miro de reojo, ella me ignora de reojo también, tiro el cigarro sin mucha puntería pero con suficiencia y desciendo las escaleras a las mismísimas profundidades del infierno.
Hay viento, que mueve el techo vegetal que los árboles en Ugarte me proponen, cambian de color, cambian de verde; la visión del rengo, la lentitud de la vieja, la provocación de un pezón que escapa del vestido “colección primavera – verano 2006” “ Andáte a la puta que te parió”, vestido, la palma de mi mano, vestido, el tamaño de mi boca, vestido los labios relajados y al fondo, el rugido del subte desplazándose sin la furia de otros días.
Ale.
“En un subte con la rubia que esta sentada cerca mío, no casualmente.”
Enero 1º de 2006.
Hay viento, que mueve el techo vegetal que los árboles en Ugarte me proponen, cambian de color, cambian de verde; la visión del rengo, la lentitud de la vieja, la provocación de un pezón que escapa del vestido “colección primavera – verano 2006” “ Andáte a la puta que te parió”, vestido, la palma de mi mano, vestido, el tamaño de mi boca, vestido los labios relajados y al fondo, el rugido del subte desplazándose sin la furia de otros días.
Ale.
“En un subte con la rubia que esta sentada cerca mío, no casualmente.”
Enero 1º de 2006.
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